La respiración es el proceso por
el cual nuestro organismo es capaz de captar oxígeno y transportarlo hasta el
espacio alveolar para que se produzca un intercambio (CO2 y O2) con el espacio
capilar pulmonar y evacuar el Co2 que se haya producido a nivel metabólico.
Ciertas enfermedades y lesiones
pueden causar un ritmo en el patrón de respiración espontánea. Los problemas
como apnea del sueño, asma, falta de aire y enfisema pueden hacer que un
individuo luche para mantener la respiración espontánea. En estos casos, se podría requerir la
asistencia de inhaladores, tubos de respiración y ventiladores.
El proceso de atención de enfermería juega un papel
imprescindible en los cuidados sobre la ventilación mecánica, a la hora de
establecer unos objetivos y una priorización de los cuidados que se realizan.
El cuidado eficaz de enfermería es esencial para evitar las
complicaciones relacionadas con el ventilador.
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